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No es un error gramatical ni le hemos cambiado el nombre a la tradicional fiesta de las Vacas por el Tajo, sino que ha nacido una nueva tradición en Trillo, las Barcas por el Tajo. El año pasado se celebró la primera edición y debido a su gran éxito, esta competición de artilugios flotantes de fabricación casera promete convertirse en un evento imprescindible en las fiestas locales en honor a la Virgen del Campo.
Las peñas preparan ya sus barcas, o como dicen en Trillo, sus “estaribeles” hechos con material reciclado, los cuales deben flotar al menos trescientos metros aguas abajo por el Alto Tajo, hasta llegar a su destino en el puerto del paraje de La Isla. Todos los participantes recibirán un diploma en reconocimiento a su esfuerzo. Además habrá premio para el barco más gracioso, para el mejor tripulado, el que ofrezca mejor espectáculo fluvial, el más original, el mejor reciclado, el que muestre mejor flotabilidad, el artilugio mejor trabajado y el que tenga la mejor inmersión.

El año pasado compitieron 25 “estaribeles” y los trillanos pasaron un buen rato viendo las dificultades que tenían algunos concursantes para salir a flote.
El siete de septiembre a las 14:00h las risas están aseguradas en la II edición de las Barcas por el Tajo.